Aupa Puerta...Aupa Sevilla...

"La muerte es creadora, pero si la conciencia de la muerte no lo toca antes de que muera, para él será, mientras viva, como si la muerte no pudiera alcanzarlo. Y esa muerte venidera no podrá concederle un carácter humano"

Georges Bataille

Ayer, alrededor de las 2:30 de la tarde, hora de España, falleció el jugador del Sevilla Antonio Puerta, a causa de una serie de infartos y paros respiratorios que comenzaron en medio del partido contra el Getafe el sábado pasado...

Como hincha del fútbol saber que un jugador muere debido al juego es algo que duele...no sólo por el amor al deporte y el respeto a quienes lo ejercen, o el hecho de que esto debería ser una fiesta, una exaltación de las pasiones y las virtudes humanas, no una tragedia. Duele porque tanto él como yo somos seres humanos...y la muerte nos duele porque trunca sueños.

Dirían los viejos sabios que la muerte duele porque estamos apegados a la vida. Estoy de acuerdo. La vida moderna así nos ha creado. ¿Qué tanto puede apegarse a la vida un hombre que en un mes iba a ser padre, en una sociedad donde el varón es quien sirve de soporte moral y, sobretodo, economico a su familia? Es aqui cuando la idea de morir simplemente y dejar todo atras, olvidarse del mundo y entregarse a las fauces de la nada que propone la tanatologia filosofica de Bataille y los sabios budistas simplemente no aplica en este tipo de cisncunstancias. Es aqui cuando se nota que el miedo no es tanto a morir, no es tanto a lo que hay despues. No. El miedo es a dejar incompleta la existencia. Los deberes y tareas que la vida impone.

No. La muerte no es injusta. Porque se lleva a todos y ya muertos, todos recibimos el mismo trato. La injusta es la vida, porque incluso ella decide cuándo y cómo hemos de morir.

La muerte, en su sentido natural, es creadora porque de la muerte se alimenta la vida. La vida devora a la vida, se destruye a sí misma, para subsistir. Uno muere para dar espacio a quienes vendrán. Pero en el sentido humano, la muerte es un vacío. Porque ahora hace falta un esposo, hace falta un padre, un amigo, un compañero de equipo, un héroe. Hace falta un hombre, uno de millones, uno que si desaparece de la ecuacion, no la afecta. Pero hace falta y por eso, por esa falta, uno llora, a uno le duele.

Sigo preguntandome porque...aunque estas cosas son inevitables...pudieron haberse retrasado de alguna manera. Para eso los clubes de fútbol tienen (o deberian tener) médicos que pudieran prevenir estos casos mediante pruebas periodicas que deben hacerse (o deberian hacerse) a los jugadores. Este problema cardiaco no surgió un día antes del partido, menos cuando hay declaraciones de que Puerta había tenido otro infarto o similar en vestidores meses antes. ¿Dónde están las pruebas? ¿Qué tienen por decir los médicos del equipo ante esto?

Por el momento...no queda más que dar desde aqui el pésame a la familia, los jugadores y aficionados del Sevilla, y todos quienes se encuentren afectados.

Y recordar al hombre por su obra, no por su tragedia...