Monday, November 14, 2011

FESTO COMIC: Ser chilango, ser comiquero, y salir del closet*

A la luz de lo que ha sido mi vida recientemente, se que tal vez debo dormir... o ir a un mèdico. Pero, a pesar de todo, necesito aterrizar (si es que divagar en este blog es, justamente, aterrizar... o sea, no lo es) una de las tres ideas que revolotean mi cabeza...y lo hacen con furia.
Básicamente, pese a la dureza que el trabajo reclame sobre uno, hay cosas que forjan la personalidad, el ser, cuya satisfacción nos mantiene humanos y cuerdos. Sí, ya me he despedido de escribir cada 15 días para una revista. Pero es bueno mantener fuertes y saludables que me atan al mundo de los comics, para descubrir, en dicha aventura, que no soy el único.
Descubrí FESTO comic hace unos meses. El concepto base, el encuentro de ediciòn gráfica, lo conocía ya. Pero, en un ambiente que parecía retar al círculo de "convenciones comiqueras" en México, capté la idea: más que renegar de una escena donde los empresarios (porque al final del día eso son los organizadores de convenciones, empresarios) han apostado por las masas que mueve el anime -y los bemoles de pirateria que conlleva la escena de nuestro país-, se buscó dignificar una parte que, aunque parece terriblemente subterránea en dichos encuentros (que ellos, curiosamente, originaron), merece una mejor exposición.
No reniego de la escena cosplay, ni de los otakus que asisten a las convenciones (al final, es justo decirlo, casi todo akiba kei mexicano ha comprado piratería, por más DVD'S y mangas originales tenga). Sin embargo, el valor de una convención (ya sea en San Diego, Japón, París o el barrio vallelupense de El Guajolote) es exhibir el talento local, unificar una escena particular y, por supuesto, generar vínculos de interacción.
He gastado tinta y palabras sobre las convenciones en México en los últimos tres años. Pero creo que aún no he dicho la tristeza que me dan las áreas de dibujantes en La Mole o la TNT. Al principio es lindo ver que hacen, por diez pesos, tu retrato estilo manga. Pero, con el tiempo, te das cuenta que hay mucho talento allì, que no pueden alcanzar niveles más altos porque, insisto, hace falta ese intercambio de ideas, con otros dibujantes y el público, para lograr una retroalimentación. Y, a partir de la misma, mejorar el trabajo.
Sí, hay una edición especial para ellos (y los actores de doblaje). Pero, aún en estos "espacios especiales", la base del evento no se cumple. No hay una interacción ni un intercambio de ideas para que el ambiente comiquero nacional crezca. Por el contrario, se añaden bonos de dibujantes y actores al concepto general: la venta de mercancía importada. Por supuesto, todos sabemos que ese es el objetivo de los eventos: vender. Pero se agradecería, desde mi particular y nada objetivo punto de vista, que se podría hacer más para la escena que los organizadores insisten en apoyar mediante su discurso.
Es justo esa oportunidad de poner a los artistas y al público sobre la mesa lo que me atrajo del FESTO. Sobre todo, porque a pesar de que los ARTISTAS acuden con la posibilidad de vender su trabajo (y, claro, a un precio justo), se ponía a la historieta en un plano donde otros espacios están lejos de colocarla: como una expresión cultural.
Tengo ideas muy bizarras del arte (sobre todo ese trauma ocasionado por el señor Walter Benjamin). Pero al menos, considero, que el comic permite un intercambio libre de ideas y construye tanto vínculos como conocimiento entre el autor y el lector. Por eso, ademàs de la mera apreciación estética, estoy convencido de que leer historietas es cultura ( aunque tus padres, fans de La Voz México, piensen que la cultura solo la dan tipos de lentes con trajes extraños que hablan rarito).
Y, sobre todo, lo que más me emocionaba del FESTO eran dos cosas. En primera instancia, el contacto de la gente con los autores. No sólo permite una retroalimentación artística, también logra facilitar una puesta en común entre diversos miembros de la escena, así como descubrir nuevas ideas de una forma más directa. Aparte de que, como fan, puedo conocer a quienes me hacen al día, con tiras, al menos una vez a la semana.
El otro factor es que se construyen y ganan espacios para las nuevas generaciones. Conozco, por amigos de mis amigos, amigos personales y amigos de mi familia, gente talentosa que puede dar mucho a un medio tan pequeño, y así lograr que crezca. De igual forma, estas estructuras, aún endebles, podrán evitar lo que suele pasarme: llegar al área de independientes en una convención, buscar un autor que me había encantado, y descubrir que el ambiente mismo lo tumbó.
Y, bueno, el fin de semana asistí. Aunque mis nuevas responsabilidades de persona "seria y trabajadora" me impidieron quedarme a todo, como antaño. Pero bueno, por más que la vida me obligue a crecer, nada crece sin raìces. Y me dí una vuelta.
Lo primero que me agradó fue lo accesible del espacio. Pequeño, lleno por momentos, pero accesible. A veces las masas impedían que pudieras entrar a ciertas secciones, pero todo para evitar problemas y, sobre todo, resueltos con buenos modos.
También me agradó encontrarme con que la gente sí estaba respondiendo. Vamos, no son las miles que atascan Tlatelolco cada 3 meses, al punto que la gente de la unidad habitacional aprovecha para obtener una fuerte derrama económica. Pero se notó que, al menos, el trabajo de un puñado de artistas había llamado la atención. Y es lo que cuenta.
Sí, tenía bien ubicado de memoria el cartel de expositores. Al grado que cacé unos cuantos, porque, la neta, si soy bien fan.

Jorge Pinto: Autor de Bunsen, tira que conozco desde antes de que fuera mega popular en Polacas. Y en el mundo. Más que proyectiva, como le pasa a muchos, es lo suficienemente buena para alegrarle la mañana a uno, así como sencilla de seguir. Quizá uno de los nombre más sonados en el evento. No es para menos: colocando a uno de sus personajes como chiste electoral, puso de cabeza al IFE. No es mentira, hasta salió en la prensa. Y tiene más votos de mi parte de los que alguna vez tendrá Peña Nieto.

Jorge Cavazos: Quizá una de las representaciones de lo que yo señalo como "integración". Básicamente, soy fan de Caballo Negro, obra que alguna vez reseñé en Conexión Manga, para que Adalisa, entonces editora, me dijera que le había "costado trabajo encontrar una tira que no que no fuera tan ácida o perversa, como para ser inadecuada en una revista leída por menores de 15 años". Amable con los fans, tuve chance de platicar con él. Y con su familia. Inspirador saber que del webcomic se pueden crear puentes, insisto. Como diría Giovanna, "hace los sketches con cariño".

José Quintero: Lo descubrí por accidente. Curiosamente, en una
TNT. Editorial Vid vendía la recopilación de Buba en su stand. Mi chica sigue a la pequeña niña nietzscheana desde adolescente. Y se volvió loca. Leí los trabajos de Quintero. También me fascinó. Todo un gusto tratar con un artista, que, como se puede ver en esta imagen, trata a sus fans con cariño. Lo cual, de corazón, se agradece.

Oubilette: Aprecio mucho a Adalisa Zárate y Aurea Freniere. Y no porque hayan sido mis compañeras de trabajo por tres años y sean, prácticamente, amigas mías. Les debo mucho de mi conocimientos sobre, de y para la escena comiquera nacional. Les debo mucho de mi entendimiento sobre este tipo de artistas, en toda la extensión de la palabra. Además, admiro su trabajo, realmente lo hago. Aparte de que me encantan sus estilos de dibujo (y el esfuerzo que le meten a contar una historia en secuencias, lo cual les envidio), pueden impresionar a cualquiera con sus habilidades en el trazo. Incluso a pintoras que hacen cuadros al óleo, en serio.




















Cintia Bolio: Más que una cacería es un descubrimiento. Digamos que llegó a nuestras manos, hace muchísimos años, una conferencia sobre la historia de la caricatura política en México. Nos regaló el conferencista, cuyo nombre olvido en un momento incómodo unos libritos, sus recopilaciones personales en distintas áreas. Yo tomé un libro sobre los moneros durante el 68. Ella, uno sobre moneras. Allí estaba incluida Bolio. También amable, talentosa, quien además se conectó con mi acompañante en un modo muy extraño, al punto de irse a fumar juntas. Por supuesto, su talento es tal que tiene un mural muy chido en el Centro Cultural España, sede del evento.

Cecilia Pego: Descubrí que hace poesía. Descubrí que ace trazos llenos de magia. Descubrimos que es una mujer lindísima. Descubrimos que olvidamos, el día que la vimos, la recopilación de moneras. Una persona muy amable y con muchísimo talento.

Chamuco: Alguna vez, tuve la oportunidad de que Jun connotado periodista me llevara a mi escritorio cada lunes El Chamuco. Al Fisgón ya lo conocía (da conferencia con los activistas de mi facultad cada 3 días), y Ríus nos owneo por telefono a mí y a dos colegas. Pilares de la caricatura actual en México, son básicos para comprender al país y no llorar (tan feo) en el intento. Nada como Rius reclamando como derecho humano a la motita.

Eso fue para mí el FESTO. Una oportunidad de que la comunidad pudiera crear comunidad. Y es en serio, conmigo iba alguien completamente ajeno al medio... que hasta hizo migas con uno que otro. No es esa "hermandad", por decirle de algún modo, lo que hace crecer al entorno. Pero sí esa oportunidad de que el talento local sea valorado como merece, reciba la atención que merece en eventos que, además, fueron creados por la misma escena para darse a conocer.

Sé que hay artistas que no menciono, y debo se franco: me faltó tiempo para conocer más, a mucha gente que se lo merecía. Por lo menos, tengo en la mira material, porque en la próxima oportunidad espero una caza más intensiva.

Es aquí cuando debo decirlo... me siento honrado, muy honrado, de pertenecer a esto. De haberlos conocido, difundido, y demás. Por eso espero poder ayudar, aunque sea expandiendo el mensaje, para que un sitio del cual me siento orgulloso pueda crecer como merece.

Wednesday, November 9, 2011

Curiosidades històricas

Observo a una pareja de frìvolos tòrtolos mirarse fijamente.
No se inmutan, no se hieren, no se hablan, no se apuñalan, no se devoran, no se abrazan, no juegan.
Hago de la mirada un menage a troi, pero con un toque de perverso voyeurismo.
Ellos se despedazan con la mirada, mientras sólo me dedico a observar su carnalidad òptica.
No se guiñan siquiera. El más mínimo gesto podría alterar un delicado equilibrio natural.
¿A qué jugamos?

Thursday, September 8, 2011

Sanshō shite kudasai (Nos vemos…)

Puede pensarse como un gesto ególatra el que haga una carta donde me despida de algo que es más grande que yo. Sin embargo, el aprecio que le tengo a Conexión Manga, a quienes hacemos o hicimos de ella una familia, y a quienes dan sentido a esa familia como lectores, me hace intentar, más que decir adiós ceremoniosamente, compartir algunas cuantas cosas. Por eso, también, será un documento casi estrictamente personal, pero a la vista de todos.
Mucha gente se niega a creerlo. He tenido problemas con muchos profesionistas del periodismo ‘serio’, con muchos años de experiencia, sobre esto. Pero vivir el día a día del anime, el manga y la cultura japoneses me han dejado enormes enseñanzas. Es la eterna discusión entre el valor de las ‘noticias suaves’ (espectáculos, deportes, moda, cine) como periodismo real frente a las notas políticas, policiacas y similares. Sólo que aquí tenemos un factor más: “¿Cómo el escribir sobre Japón y sus monitos puede ayudarte a comprender el mundo real?”. Y sí, es una cita textual que me guardé desde hace un buen rato, gracias al director de una revista de comunicación y medios muy leída en la UNAM .
Sin embargo, escribiendo sobre el anime y manga confirmé la valía de un principio muy básico para mi quehacer profesional: nunca le mientas a tu lector. Para muchos, puede parecerle patético resaltar un detalle así en algo tan “superficial” como una revista de animación japonesa. Pero, tomemos en cuenta que estamos construyendo (o reconstruyendo) una comunidad particular que tiene derecho a crecer. Y, personalmente, mentirle sobre que una serie es perfecta sólo porque es popular, o que una convención estuvo padrísima cuando, en realidad, fue un fiasco, más que hacerla progresar la puede hundir en un cruel auto-engaño.
Claro, también tuve en cuenta que, al hablar de manera equilibrada u honesta sobre series, artistas o eventos en particular, muchos fans se lo tomarían personal. Advertido estaba de un los ataques físicos que recibió una compañera por escribir un ácida sátira sobre Evangelion ( y la cual, como fan, a mí SÍ me HIZO REÍR). También de la cantidad de trolls que iban a mentarme la madre en línea. Pero siempre estuve seguro, en primer lugar, de que siempre que dices cualquier cosa, alguien se ofende (hay astrónomos que arman pancho si les dices que el cielo es azúl, imagínate). En segunda, que ante los trolls y los ataques, si un texto está bien armado con ARGUMENTOS, uno sale avante. Y, tercera, es que, como egresado de la Facultad de Polacas UNAM (el nido de trolls de la vida real más grande del país, y si no me creen, entren a una clase matutina de Comunicación Política), los de internet son juego de niños.
También noté un severo cambio en la manera en que un grupo social, al que amo pertenecer, evolucionó en los últimos años. Cuando entré a Conexión Manga, el ecchi era una corriente marginal todavía, el loli un tabú, y las historias shonen, shojo y, claro, el josei, eran la constante. Sin embargo, también ví como la crisis del 2009 le pego a la industria, que apostó por el fan service para salvarse y limitó la apuesta de las historias ‘con sentido’.
Debo explicarles de una vez: si bien sigo desde los 4 años a la animación japonesa (los de cajón: Saint Seiya, Dragon Ball y Sailor Moon), fue con historias como Evangelion por las que decidí quedarme. Buscaba algo diferente, como mucha gente que ya lleva años en el medio. Gente como mis primos, por ejemplo. Omar Soto, quien hace unos doce años me prestaba las revistas españolas para estar al tanto, así como por su culpa conocí los fanzines mexicanos. O Lion, quien normalmente con sus amigos llevaba (y lo sigue haciendo) tertulias etílicas sobre el anime más allá de la pantalla. Curiosamente, Omar terminó logrando su sueño de convertirse en actor de doblaje, mientras el Lion está por convertirse en un animador de carrera. Vamos, que todos terminamos haciendo de nuestra pasión un modo de vida.
Sin embargo, todo cambia. El devenir de la existencia trasladó a nuestro grupo social a la red. Hace diez años, conseguir un CD mal quemado, con la serie mal grabada de Evangelion, pobremente subtitulada y en Real Video, costaba 150 pesos. Hace seis, conseguir un fansub era tarea de locos: instalar un cliente P2P privado, intercambiar cosas con tus amigos, o esperar a que alguien se conectara al Torrent para servir como seed y descargar. Hoy, hay lugares donde un DVD con una serie completa sale en cinco pesos y hay páginas donde los fan subs y el scanlation pululan y gratis.
Tengo opiniones muy particulares sobre cómo se encuentra la afición entre los nuevos fans. Pero, aunque no concuerde con ellos en mucho (sobre todo en la facilidad para tomarse todo tan a pecho, sin la tolerancia que la comunidad exige y debe cumplir), este post no tiene la finalidad expresa de señalarlo. No sé si el ponerlo bajo los reflectores hace no mucho haya sido un granito de arena. Sólo espero que estos fans, quienes han convertido nuestro hobby en una tribu urbana (tiene lenguaje propio, códigos particulares de gusto y conducta, así como vestimenta particular, no me parece descabellado concebirle como tal) no la dejen morir entre flame wars, trolleo instantáneo y una falta de apoyo (consciente) al doblaje, a las licencias y varias iniciativas que buscan conjuntar al fandom en una comunidad (que, sí, son escasas).
Si bien he visto convenciones, marchas y muchos eventos, hace mucho que no veo un intento de unir a los fans del anime, manga y similares para compartir la afición. Quizá el último (y tal vez único) proyecto así fue el Carnival of L’arc. Básicamente, era un tributo a L’arc en Ciel, donde bandas de cover J y K-Pop/Rock sirvieron como escenario a una sana y peculiar convivencia de fans. Hubo proyectos de radio y clubes de fans que salieron de ahí. ¿Cuándo fue la última vez que una convención fue un punto de encuentro? Quizá las dos versiones de Oshimai, que además fue una respuesta a los golpes que una convención dio a la fanaticada.
Por mi parte, espero que estos tres años hayan ayudado a alguien a entender mejor algunas series, cuestiones del anime-manga o, sencillamente les haya hecho pasar un mejor rato. Les estaré dando lata un ratito más, eso sí. No me voy muy lejos y, si algo he aprendido con toda la familia y amigos que hice aquí, es que todos los que se van terminan volviendo. Y yo les puedo asegurar que en CM se queda mucha gente con el talento suficiente para llevar la revista igual o mejor que hasta ahora.
Porque, si algo me ha enseñado este trabajo, es que decir Sayonara es de mala educación…

Saturday, August 6, 2011

Otro post inncesario sobre la Rosa de Guadalupe

No puedo creer que esté haciendo más de un post sobre un telenovela que no lo necesita y, mucho menos, lo merece. En este momento, un par de guionistas sin talento están siendo recompensados por llevar atención y rating a una emisión que no tenía ninguna de las dos cosas. Y, pese a lo absurdo de la situación, seguimos hablando de ello.
El coraje de que algo tan soso y banal sea tema de conversación me enferma. Así que seré más cínico de lo que soy realmente. Y, por tanto, voy a seguir un orden muy personal de ideas.
Recomiendo, si lees desde facebook, que cheques este texto en su fuente original

CONTEXTO (Siempre necesario) ¿Qué es la Rosa de Guadalupe?
En 2008, después del retiro de Silvia Pinal de la Televisión con su programa "Mujer , casos de la vida (ir)real", era necesario un show melodramático para llenar el carísimo tiempo de satélite. Entonces, algún genio de Televisa decidió unir dos de los pilares de la televisora (Telenovelas+Virgen de Guadalupe), y crear un super concepto.
Como ya dije, la estructura argumental del show es simple:
-Los personajes principales provienen de una familia con broncas muy serias, con tendencia a la disfuncionalidad.
¿Mamona? ¿Lesbiana? ¡No! La niña fue violada y los padres le quitaron al chamaco.
Ni te lo imaginabas, verdad escuincle, ya le ibas a mentar la madre por aguada,
pero aguada se la dejaron.

-Dichos protagonistas con problemas en la casa, para potenciar el factor dramáticos, se meten en problemas a la menor oportunidad. Lo anterior gracias a actos muy inocentes, algo desafortunados y/o escandalosamente estúpidos.
"Te dije, Fuckercia, que el ' Saw Tatoo Shop' no era un buen lugar"
-Normalmente hay uno o más villanos, aprovechándose de la poca inteligencia del pueblo para cometer actos ruines. Normalmente va pegado con el punto número dos, pero había una imagen bien particular que quería poner.

Linea memorable del episodio de Farmville
"Cuando estos loosers estén comprando sus semillitas, les vamos a robar
los datos para desfalcarles la tarjeta de crédito (risa malévola)"
(Rémoras de atrás) "(RISA MALÉVOLA) Seeeeeeee!"
(/b/lackup Hi5!)
-Aquí viene la contribución más grande del programa a la larga tradición telenovelera nacional: los caídos en desgracia, o sus familias, le rezan a la Virgen de Guadalupe para que los saque del embrollo en que se metieron. Si en la Vida Real funcionara (sobre todo con San Juditas), no habría dolor, sufrimiento y, mucho menos, reos en las prisiones. Pero, bueno, es una telenovela. Para complementar el combo, suena música New Age en el momento del rezo, junto con un Viento Plateado que hace aparecer una misteriosa rosa blanca (A que no sabías que el programa tenía truco en el título).
"Nican mopohua, motecpana, in quenin, yancuican, huey tlamahuicoltica, monexiti in cenquizca ichpochtli"

-Todo lo anterior viene complementado con una escena final donde las familias disfuncionales toman consciencia de los valores nacionales. Platican todo lo que no habían platicado en años y, al final, sale que se quieren mucho, aceptan su problemas, salen adelante, sale un anuncio del Servicio Público, FIN.


Mamá, soy emito, ya no haré travesuras.
¿En qué se traduce todo lo anterior? En una serie irrelevante, con un montón de humor involuntario, grande fracasos en conocimiento sobre los temas que trata y, sobre todo, una apariencia de programa con bajo presupuesto que no se las quita nadie.

CONTEXTO II (La raíz de la bronca): De el fandom y sus reacciones por adelantado...
Sobre las reacciones al preview (muy adecuado en esta categoría de la infalible TV Tropes) de la Rosa de Guadalupe, ya hablé en el post anterior. Vamos a lo "actual":

El episodio trata sobre una adolescente, con no más de 17 años, quien es amante del anime. La nena se reúne con un amigo para hacer cosplay de "Namiko Moon", la Guardiana del Génesis, y "Hiroshi San" el Gladiador del Horóscopo. Hasta aquí todo normal (en estricta teoría).

No, no es Gokú, poser. A diferencia de los Guardianes de Horóscopo,
los Saiyajin viven en el plaeta Vegeta, no en La Lagunilla.
La niña sufre acoso escolar, maltrato psicológico y tanto ella como su amigo ya sacaron boleto, pues sus compañeros de clase quieren salvar al mundo pero de estos dos freaks inadaptados. ¿Por qué tan agresivos? Bueno, no esperaba un trato muy diferente para una niña que va por la vida diciendo que es un personaje de caricatura, se maquilla que da miedo, usa peluca diario y cree que, por creerse una enviada del Génesis con poderes del cosmos, puede decirle a todo mundo que lleva una energía maligna. Es justamente todo lo anterior lo que provocó una oleada de trolleo a Televisa, pues en la opinión de muchos fans esto los retrata pésimo.


"Gente del mundo: alcen sus manos para hacer una Genki Dama que
le dé más rating a Peña Nieto"
Quizá inspirados en los trabajos argumentales de Hideaki Anno, para entender este episodio de "La Rosa..." uno debe tener bien leído a Freud. Porque los berrinches de la nena porque no quiere comida china, sus rituales a las 4:30 de la mañana y sus actitudes de diva mágica se deben al abandono del padre. Si bien a la madre le importa un ídem lo que pasó con el marido, a la niña le afecta que se haya ido el padre con su enorme y grueso cariño.

Con semejante maquillaje, no
sorprende que durante el programa abundaran
anuncios sobre medicina para los ojos rojos
Otro punto a destacar es que la madre es realmente inepta. Se queja y queja de que la niña le salió rara, pero no es hasta que la abuela le recuerda su trauma con Candy Candy y que se creía miembro de Parchis (Killeeer Combo!). Entonces, se decide a investigar sobre el anime para entenderle a su hija. Se sienta a comer pockys (considerada como comida de los dioses por su nena), canta Karaoke y ve series con su chamaca. Todo un ejemplo de madre abnegada.

Esa lengüita la he visto antes cantar en algún otro lado...

Sin embargo, esto no sirve de mucho cuando en la escuela le tratan al engendro sus compañeros como si fueran un escuadrón escolar de exterminio. La amenazan de muerte, la siguen a todas partes para insultarla y juran la aniquilación de ella y sus amigos. Esto no sólo nos da una idea de que toda la escuela está completamente chiflada y deberían meterlos a todos al Hospital Psiquiátrico Infantil Juan N. Navarro. También resulta en que un morro que la molesta nomás porque le trae ganas ya quería tronarle los huesitos, lo quisiera ella o no. Se salva por el primo skato y una amenaza de tablazos en la choya del malandrín.

Vaya fracaso de línea: "Te voy a tocar y me vas a hacer caso".
El realismo y la sintaxis en su apogeo.
Todo se arregla con 3 días de suspensión como respuesta de la directora del plantel a un intento violación (WTF!) y a un Crowning Moment of Awesome: "Yo tengo una misión como mamá". Es decir, va a una junta de padres de familia con cosplay y exige respeto para su niña. Al final, después de ver a toda la Gestapo en miniatura cantando Karaoke y riendo junto con los frikis, aparece un mensaje de la máxima que un presidente mexicano le robó al filósofo alemán Imanuel Kant.
El verdadero problema de Namiko Moon es lo que Jung denomina "el síndrome de la ficha amarilla". Una vida maternal
estancada en pasado y el abandono del padre contribuyen a esta distorsión en elbuen gusto.
SOBRE LA REACCIÓN DEL FANDOM
En más de tres años de trabajar, de manera profesional o no, en medios de manga y anime siempre he buscado no tocar al fandom. Puede molestarte algún grupo de fans prototípico, pero sabe muy bien que el fandom es muy diverso y, además, sus preferencias merecen un respeto total. Puede parecerte alguna serie un completo fiasco, pero lo crticable siempre es la serie, no sus seguidores.
Aunque, como en este caso, el fandom se avienta unos fails monumentales...


Una vez me dijeron que mis quejas sobre Hetalia y su forma 'light'
de tratar la Segunda Guerra Mundial era exagerada. ¿Y luego?
Ultra combo: el Museo Bostoniano del Holocausto estaba..
a DOS CUADRAS
De año y medio para acá, me ha preocupado mucho la forma en que muchos fans del anime y manga defienden sus intereses. Si bien ha sido una de las subculturas más radicales en cuanto a gustos, eso no da derecho de insultar a la gente que no los comparta o no opine lo mismo que tú. Y, para ejemplos en esta comunidad, hay muchos.

-Los fans de "esta serie" contra los fans de "esta otra". Porque tratan de los mismos temas, son populares en el mismo tiempo o, simplemente, por el hecho de que ambos quieren que su serie sea "la mejor de todos los tiempos". Me ha tocado ver duelos hasta de "Sakura Card Captors contra Lucky Star", porque en un foro alguien queria ver quién era más linda: Si Konata o Sakura. Y durante unos días fue una sarta de insultos entre los fans que apoyaban a Konata y los que apoyaban a Sakura. También aplica para los fans de Bleach que quieren que de tanta atención como se le da Naruto y los que detestan a Bleach porque quiere "ser como Naruto".

-Los fans de "esta serie" contra los que no les gusta: Dícese de los fans de Hetalia o Haruhi (o Evangelion... o Lupin III, o cualuier otra) que se insultan personalmente si dices que su serie no está tan chida. Te dicen loco, amenazan con lincharte, te amenazan físicamente y lo que sigue. Incluso, si rematas sus protestas con argumentos, rematan con el educado: "Si no te gusta, entonces no la veas".

-Los "otakus" contra quien sea: Esto es una anécdota bien personal.
Era una marcha convocada para celebrar y exponer el "Orgullo Friki-Otaku" (nombre que, en términos literales, es como si la marcha del orgullo gay fuera del orgullo 'joto-marica'). Más que para exigir conscientemente espacios y calidad para la expresión del fandom, la marcha fue una divertida muestra de inconsciencia. Nadie sabía que quería lograr con ello: unos lo tomaron como una convención magnificada, un desfile monumental de cosplay y una protesta contra una ley 156 que no habían leído, pero les parecía "mala" (y se los pregunté personalmente).
Lo que sí me impactó, y mucho, fue que varios grupos empezaran a gritar cosas contra los "nacos", "chacas" y "reguetoneros" por todo el camino. Pueden caerte mal, claro, pero sin están buscando tolerancia, no puedes atacar con intolerancia. Algunos chicos del centro que iban rumbo a La Lagunilla fueron insultados directamente por alguna que otra multitud.
Y eso fue más o menos lo que se descargó aquí. Bastó solamente el preview, de una serie que la mayoría desconocía, para pedir sangre y clamar por la cabeza sangrante de los escritores y actores. Está bien, nos enojamos algunos, pero no era la idea salir a exponer los malos modos, la prepotencia, la falta de tacto y (penosamente) la pésima ortografía (la siguiente galería del fracaso fue recopilada en el tumblr de Cacaotacu)

El que sepas japonés, mi alma, no te quita la obligación de respetar el castellano y razonar lo que escribes.

Como parte del movimento akiba-kei, me siento profundamente apenado por la oportunidad perdida. Nos quejamos de que ya no nos ponen atención, de que nos están quitando espacio, de que estamos apsando desapercibidos. Pero cuando los reflectores están sobre nosotros (o nos ponemos a la fuerza los reflectores porque, como dije, el programa este es totalmente irrelevante)... preferimos pasar como groseros y analfabetas funcionales.
Es triste ver que, quejándonos de ser retratados como personas ajenas a la realidad, nos pintemos nosotros mismos como ignorantes ajenos a la buena educación. Que pidamos respeto, pero no sepamos respetar. Y, sobre todo, que estemos protestando contra algo realmente sin sentido, cuando a Televisa se le pueden espetar cosas mucho más importantes que ha hecho contra la juventud y contra otros grupos.

Ahora, yo pensaba que las mentadas de madre que yo y varios colegas o fans (de CM, de algunos foros, de varios blogs) nos llevamos porque no nos gustan sus series no iba a tocar a alguien como Álvaro Cueva. Si a alguien debe por lo menos respetar el fandom en este país es a él, porque entre las críticas hacia nuestra afición, el ha respondido mostrando el anime como contenido de primera calidad. Sin embargo, en su columna del viernes 5 de agosto, Cueva comenta:
Usted no me creería si le contara la cantidad de insultos que he recibido por hablar de un título y no de otro, por haberme equivocado en la pronunciación de un nombre en japonés o por cualquier tontería.

¿Así o más prepotentes? ¿Así o más groseros?

Es aquí cuando yo digo (3.2.1...): ¿A dónde chingados vamos como grupo cultural? No quiero culpar a la generación que no vivió el desmadre del 99, donde nos decían satánicos abiertamente y quemaban nuestras cosas, de esto. Así que diré: ¿O no aprendimos nada, o dejamos TODOS que esas lecciones se olvidaran? Atrás parecen haber quedado los intentos de msotrar al mundo que el anime transmite valores de la mejor manera: con el ejemplo. En vez de ellos, estamos quedando como ridículos maleducados, intolerantes, prepotentes y agresivos.
Lo que más me duele es que todo este relajo no se hizo por algo que valiera la pena. Hay muchas cosas más importantes por las cuales el fandom, como juventud, debería protestar. Están matando estudiantes en Chile, están tratando a los jóvenes en México como criminales, la educación y el empleo no es sufienciente para lo que la juventud mexicana necesita, hay muertos por el anrco, muertos de hambre....
¿Y cuál es lo que nos ofende? Un telenovela absurda.
Tenemos muchas lecciones que aprender. Les dejo una, desde los akiba-kei chilenos.


Tuesday, August 2, 2011

Mis dos centavos sobre el tema de la Rosa de Guadalupe y el cosplay.

Como ya dije, esto es son sólo mis dos centavos. Mi insignificante aportación a una discusión en boga, pero carente (a mi parecer) de más de tres puntos de vista y la suficiente autocrítica.

Lo cosa está así: el lunes, la irrelevante serie-telenovela-relleno de tiempo/satelite "La Rosa de Guadalupe" anunció, con bombo y platillo, su siguiente episodio. O sea, esto:


Como podrá usted darse cuenta, mi seguramente desconocido lector, el episodio tratará (al momento de escribirse estas líneas no ha sido emitido aún) sobre cosplay, la afición por disfrazarse de algún personaje de serie televisiva, videojuego o historieta, preferiblemente japonesas. Y, como podrá usted observar, el avance da por hecho que:

-Quien realiza este pasatiempo es una persona con problemas para distinguir la realidad de la ficción.
-Son tipos repudiados por la sociedad "normal" que los rodea.
-Todo padre consciente debería estar preocupado (si no es que alarmado) de que su hijo ande en estos pasos.
-Por andar en andadas raras, a alguien le pueden meter por la fuerza algo más que un simple susto.
-(Lo más importante) Si le rezas a la morenita del Tepeyac (no a la morra fresa de Lindavista, sino a la Guadalupana de la Basílica) todo saldrá bien, sobre todo si eres de esos "padres conscientes" asustados por cualquier cosa de moda.

Es justamente ese último punto por lo que no me asusta TANTO ver este tipo de temáticas en "La Rosa de Guadalupe". Es más, es tan ridículo que sería perfecto para un meme y no para un linchamiento masivo.
¿Qué es "La Rosa de Guadalupe"? Hasta donde yo tenía entendido, era una forma muy kitsch y útil de rellenar espacio en la barra programática del Canal de las Estrellas. El horario que mantiene es un horario muerto para todo programa que no sea infantil. Entonces, hay que recurrir al ingenio para generar el rating suficiente que dé ventas regulares de publicidad.
La fórmula es simple:
-Hay siempre un típica familia mexicana (madre abnegada FTW!) con serias broncas de cualquier tipo.
-La pobreza o el romance cenicientero no aplican para historias de un episodio. Por tanto, hay que tocar temas de moda. La patente le pertenece a Silvia Pinal y sus "casos de la vida real", y ha explotado a los emos, los punks, las Torres Gemelas, Andrés Escobar, la Bulimia, la Anorexia, la crisis financiera, la inmigración, los narcos, los hijos de los narcos, Niurka y Juan Osorio, luchadores enmascarados, los ovnis... todo lo que sea posible, esté en boca de la gente y la mayor parte de los televidentes no tenga la menor idea de dónde salió. No me extrañaría que hubiera un episodio del FUA pronto.
-Como el capítulo dura menos de una hora, debe generarse el drama en chinga. Lo cual es muy fácil: la persona que está en la circunstancia polémica de moda debe hacer algo muy inocente, desafortunado o titánicamente estúpido para meterse en líos a la primera de cambios.
-El sello de la serie es maravilloso: el lío anteriormente señalado se resuelve, conjuntamente, por la familia abnegada en colaboración con la Santísima Virgen y su aliento de flores, concluyendo con un mensaje del Servicio Público.

El objetivo de todo esto, más que concientizar a una masa de que los problemas del mundo son por todo lo que no comprenden, es rellenar espacio. Que el televidente se quede, al menos, media hora a ver qué onda, atraído por lo ridículo de las situaciones o el tema "fuera de lo común" que tocan. Pero nada más. Poca gente se toma en serio el programa, e incluso he visto a señoras telenoveleras (mi santa madre incluída) reírse por lo absurdo de lo que en pantalla aparece.

Ahora, que para Televisa los otakus son satánicos y están locos, eso me queda claro. Pero vio la polémica de Drangon Ball Z, su violencia y sus mensaje diabólicos con buenos ojos, porque le dio RATING. Aunque, en esta ocasión, apela más al sentido paternal de "no entiendo qué hace mi hijo adolescente" en cualquiera de sus variedades, en lugar de "esta moda es mala y debe desaparecer" como la han interpretado varios.

Que nos retrata mal, estoy de acuerdo. También estoy de acuerdo en protestar. Pero, y debo decirlo... (Atención: La participación de Neto-Webmaster en las siguientes líneas puede parecerle graciosa, o brutalmente ofensiva, sobre todo si es usted un fan del anime con poca autocrítica. Use de preferencia el siguiente audio como referencia sonora. Gracias).


¡Me recontra caga que los "otakus" tengan a bien escribir como analfabetas funcionales y tiendan a ofender, como albañiles o hinchas ardidos e iletrados de la Mono-mental del América, a quienes están en desacuerdo con sus series favoritas o aficiones!

"se los van a follar a todos y a cada uno de ustedes...putos cerdos de mierda"

"son una mamada!! como k hacen un capitulo de rosa de guadalupe(yo solo critiko la serie no religion) no puede ser pocible k agan un capitulo donde hacen k alas personas k les gusta el anime se vean las mas pendejas e idiotas del mundo claro komo ya no se les ocurre otra cosa pz piensan en chingar a otros!!x k no se encargan de hacer cosas mas positivas x k x eso mexico esta como esta x mierdas como esa !! x k la cultura japonesa es una de las mejores si se dan cuenta deverian mejor hacer series menos mensas para k progrese aunk sea una minima parte mexico no lo creen?".

Note, mi bien amado lector, cómo esta gente exige respeto a sus ideas, expresándose públicamente de forma educada y respetando, a cabalidad y la gramática. Y que mi explosión de honestidad tiene como fin referirme a ese público particular en sus propios términos.

Me gusta, por ejemplo, que diversos webzines hayan tomado con seriedad el asunto. Que haya aficionados e incluso amigos que hayan tomado con madurez la polémica. Que en medio de las mentadas de madre y la violaciones, peores a la que amenaza a Namiko Moon, al lenguaje castellano, haya llamados a la concordia y opiniones realmente críticas respecto a Televisa. Me siento orgulloso de este clan por ellos.

Mientras tanto, como toda la vida, espero que este clan, en su colectividad, realmente madure. Que se tome en serio como grupo social. Que se una, pero también que se respete. Hasta ese día, quizá, tengamos un poco más de respeto.

Mientras eso, en unas horas sé que voy a reírme del pésimo guión y las involuntariamente chuscas actuaciones, para después ver si todo esto fue realmente tan cataclísmico y holocaustico como parecía.

Friday, March 4, 2011

Radiohead en tu nombre (cuento breve psiconarcótico)

No creo que te interese la miseria humana frente al ordenador, abandonado a la suerte que tus manos dicten y bajo un juramento de eterno silencio. Amante indigno gracias tus ojos que se han devorado mi dignidad restante. Sin embargo, aún hay fe en el futuro. Mira que, sin ser adivino, sólo sé que al fondo de este camino está la muerte. Mira tú, tan contenta, y yo esperando que la caducidad descomponga mi animalidad innata. Ja, que buena broma del destino, carajo.
Me levanto para agonizar de pie y que no haya duda: este árbol de plástico se pudrió entero, sin mácula que probara esa agonía que l destruyo por dentro. Jo, interesante situación, ahora sólo espero que vengas, utilices mi imaginación poderosa para hacerme el amor. Y te largues como ramera, aunque estés lejos de serlo en lo absoluto. Mi mente te prostituye, y eso es una losa dura para arrastrar. Intenta un día y carga con mi consciencia. Si mi espalda no se ha roto aún, es por mero milagro.
Y vienes otra vez, para anegar con keroseno la duela de mi recámara. En pleno duelo por aquella voz que me ha robado mi pacto de silencio, le prendes fuego a mi espacio vital. Todo arde, desde las fotografías que te he robado para guardarlas en cada rincón de mi habitación. Las cartas de amor sadìstico que nunca te entregué, bajo la promesa de no asesinarte en el acto. Mis dibujos y poemas atascados de brutalidad, donde tu cuerpo es presa de mis más primitivos instintos. Incluso aquello anteriores a toda noción de civilidad y que tú conoces muy bien. O al menos eso creo, porque pierdes toda noción de humanidad toda vez que mi cerebro, en sueños, te hace presente.
Haciendo trizas toda concepción existente sobre el funciónamiento de mi hipotálamo. La rabia nubla la vista del más sereno, vienes a mí de nuevo. ¿Qué ganas con reírte de mí así? Juro por tu madre muerta que jamás voy a perdonar tamaña burla. ¡Para mí estás muerta! Yo mismo te sepulté entre las llamas, perra desagradecida. Yo mismo devoré tu cadáver. Yo mismo, ¿entiendes? Si vienes a cobrar venganza, jugando con mi memoria, lamento informarte que ese trabajo ya lo hiciste antes. ¿Quieres más, sádica desgraciada? No quiero arrodillarme para encontrar tu rostro y derrumbarme. No tengo nada que reclamarte. Me has hecho muy feliz. ¿Pero ahora?
Has logrado tirar en sus rodillas a un pobre diablo ¿y ahora? Mis recuerdos se incendian y estás presente. Eres lo único que existe en mi cabeza. Tú y tu piel. Tú y tu mirada. Tú completa. Y nada más. Has profanado lo único que estaba libre de ti. Te has expandido como un tumor y yo agonizo en tamaña metástasis. No hay cura, más que la extirpación. Y así, entonces, para librarme de ti tendría que volarme los sesos sin más ni más.
Debía haber puesto concreto en esa tumba que cavamos juntos. Y haber tallado en una placa tu nombre. Debí limpiar tus huesos y destrozar tu corazón. Debía haberme sumergido contigo en el mar para no volver. Debí asegurarme que no volvieras a destruirme. ¿Qué no ves cuanto he renunciado a mi vida desde que decidimos tu partida? Ya estoy muy jodido para que vengas y me recuerdes que aún existes, en alguna parte.
Sobre mi lecho te entregué al Señor. Una cama en la cual mi sueños ya no se concilian. Sepulte tu cuerpo tan profundo como pude y has escapado de la tumba , para venir y hacer pedazos toda voluntad en mí. Juro por el dios al que solías encomendarte que te buscaré al otro lado del portal para terminar mi tarea. Pero, por ahora… sólo sé que estoy ardiendo.